Al poco tiempo ya me encontraba a la entrada de dicho lugar en el pueblo desértico y congalero que es Tlaquiltenango (Dato.- Tlaquiltenango se divide en 4 porciones territoriales 73% El rollo, 20% milpas y cañas, 8% nada, 1% las casas de Edgar). Fui recibido por 2 súper-modelos venezolanas, las cuales supuse, Edgar compró en linea, ellas me escoltaron hacía una de las palapas alrededor de la piscina central, allí estaba él, rodeado de las últimas 15 semifinalistas del concurso Miss Universo, las cuales supuse compró en linea, se percató de mi presencia y me dijo "Órale puto, jálate unas viejas que no las compré a lo pendejo", y pues ya saben como es uno.
En cuestión de minutos empezaron a ocurrir una cantidad de eventos demasiado extraños como para poder (querer) recordar, eso aunado a la cantidad de sustancias que, en ese momento, habían ya en mi sistema, pero trataré de enlistar, a continuación, en orden cronológico que fue lo que pasó hasta que perdí todo rastro de conciencia y voluntad propia:
- 2 rondas de caballitos de mezcal Zigma.
- Un torneo de beer-pong.
- Un torneo de beer-pong sustituyendo la cerveza por agua loca de LSD, tonayán, agua de río y tang de horchata.
- 8 horas de jugar Turista, desnudos.
- 1 ronda de perlas negras flameadas.
- 3 horas de mesa redonda y debate acerca del aborto y las ETS.
- Apostar en las carreras ilegales de perros.
- Un concurso para saber quien se fumaba el porro de marihuana más largo.
- Un concurso para saber quien mamaba el pene más largo. (Empate en el primer lugar entre Edgar y yo)
- 5 horas de un show de stand-up comedy (mío)
- 7 horas de Edgar imitando a los maestros de la universidad, quien no se reía era asesinado al instante.
- Carreritas de lineazos de cocaína (Yo gané)
- 9 horas de escuchar La célula que explota de Caifanes, mientras llorábamos, quien no lloraba era asesinado al instante.
- 4 horas de drogarnos con peyote y crystal meth al ritmo del dubstep más atascado que pueda haber.
- Vomitar y llorar hasta dormirse. (concurso)
Pero todo llegó a su fin cuando el anfitrión de la fiesta se retiró a dormir, y pues debido al número de muertos y delitos acumulados en 9 días de fiesta de perreo intenso de la chavalada loca, decidí que era hora de retirarme a mi humilde morada en Malibu. Los niños esclavos vietnamitas, los cuales supuse compró Edgar en linea, empezaron a limpiar y a poner nuestras bebidas en vasos desechables, yo pedí que me dieran una copa para llevarme mi trago, se negaron a hacerlo y me pidieron algo a cambio y pues ya saben como es uno. Les di $5 y me fui con una botella de Chivas Regal 21.
#YOLO #SWAG #YOLOSWAG